CUARENTA DÍAS DE AYUNO VOLUNTARIO REGADOS CON CERVEZA. ESTA ES LA DIETA QUE INVENTARIO UNOS MONJES FRANCISCANOS EN ALEMANIA Y QUE HOY, EN PLENA CUARESMA CRISTIANA, SIGUEN ALGUNOS.
En el calendario cristiano, la Cuaresma es un periodo de 40 días que se inicia el Miércoles de Ceniza y termina el Domingo de Resurrección. Es un tiempo litúrgico para guardar ayuno y para la oración, un tiempo de purificación, de preparación para la Pascua… Y para los frailes miembros de la católica Orden de los Mínimos de San Francisco de Paula, que vivieron en el S. XVII en un claustro a las afueras de Munich, la Cuaresma fue su tiempo de ayunar con cerveza.
Pero no una cualquiera. Para estos días de conversión y penitencia, los frailes elaboraban su propio “pan líquido”: una cerveza con gran cantidad de carbohidratos y nutrientes, dulce, con bajo nivel de alcohol y una fuerte consistencia. Hoy, su estilo se correspondería con una doppelbock.
Varios siglos después, esta referencia cervecera sigue viva y también el plan de ayuno que la acompaña. En 2011, un periodista cristiano llamado J. Wilson realizó la dieta de la cerveza: fabricó su propia versión de la doppelbock a la que llamó “Illuminator”, documentó el proceso en un blog para la CNN,
https://religion.blogs.cnn.com/2012/02/25/my-take-what-i-learned-from-my-46-day-beer-only-fast/, y escribió un libro sobre la experiencia: “Diary of a Part-Time Monk”.
Comprobó que sí, que el cuerpo humano resiste este tipo de ayuno -que él completó con agua- y, de paso, adelgazó 11 kilos. No ha sido el único en querer probar el ayuno con cerveza ni en haber dado fe pública de su éxito al seguirlo.
Hace un par de años, un veterano del Ejército, corredor de maratones y trabajador de Fifty West Brewing Company en Cincinnati (Estados Unidos) probó este alegre ayuno franciscano.
@Del_Hall perdió 18 kilos en 46 días. https://www.instagram.com/sgtdel/?hl=es
También bebió mucha agua durante su cuaresma cervecera y fue monitoreado por un médico. En 2020, volvió a repetir la experiencia. Como resulta que, además, vio bajar sus niveles de colesterol y la presión sanguínea, este 2021 sigue con su método #beerdiet. En esta ocasión, su cuaresma cervecera tiene fines benéficos. Los monjes franciscanos estarían orgullosos.